lunes, diciembre 11, 2006

14:15 (La hora del postre... don sata)


El título de este post lo obtuve viendo un graffiti en la Biblioteca Nacional, seguramente es uno de los rastros de las manifestaciones del día domingo 10 de diciembre.
Lo que vino luego de las 14:15 fue vertiginoso. Llantos, de pena y de alegría. Un ejercicio emocional, en pro y en contra, muy pocas veces visto. Pero lo que más me llamó la atención de esa tarde, fue el renacer de las expresiones "salvador", "gran estadista", "liberador", etc. Además de recordar la expresión juicio histórico, que dicho por los partidarios del "abuelo macabro" (expresión de Lemebel en un programa de TV "desaparecido") hacía alución a una parusía mesiánica del difunto dictador.
Como he señalado en otros post, yo nací en el año 1976. Y dicha expresión ya la había escuchado para el triunfo del No. Hoy, casi 20 años después, creo que dicho juicio se ha ido haciendo paso a paso. No es un juicio fácil, pero así y todo, hay varios hechos que pueden juzgarse, sin necesidad de un juez profesional. Por ejemplo, los calificativos señalados anteriormente.
Si Pinochet es un salvador, un estadista y un liberador, sería este uno de baja monta, más bien dicho: mediocre. Quizás los mayores logros que se le atribuyen al señorzuelo sea en el plano económico y a la conformación de un país con un estado liberal. Pero hoy día, la educación, la salud y las pensiones, y Muchos otros de esos proyectos económicos que nacieron en los 80, viven momentos complejos y críticos.
Por otra parte, la imagen del Pinochet fuerte, de aquel que no se movía una hoja sin que él lo supiera, se ve profundamente contrariada con el hecho de nunca reconoció su responsabilidades políticas y judiciales en los distintos procesos que vivió. Y si él es el gran estadista del siglo XX, este no es más que un irresponsable. Ya que no fue capaz de decir esto lo mandé yo, o bien supe de esto y callé. Nada. El gran estadista se convierte en un brabucón de cuarta. Es decir mientras me teman los cago a todos, pero cuando el temor pasa, es mejor pasar "piolita" y hacerse el weón. Mientras caigan los Contreras, los Corvalan y otros señores matones, todo bien.
Esto es el remedo del heroe y del dictador griego. Nuevamente la mediocridad.
Por último, y como dijo Velasco... "Pinochet pasará a la historia como "uno de los tantos dictadores de derecha" que se hicieron ricos y violaron los DD.HH". No solo no fue capaz de hacerse responsable, sino que no lo hizo del peor atentado que un estadista puede hacer a su estado: robar.
En conclusión el salvador mesiánico se crucificó solo. Con esto, Pinochet, no murío a las 14:15, el domingo 10 de diciembre de año 2006. Pinochet ya estaba muerto, es que no nos habíamos dado cuenta y buscábamos a un muerto entre los vivos. Pinochet murió a las 14:15, pero mucho, mucho antes.